Optimización de UI para un diseño impactante
La optimización de UI es una de las claves de un excelente diseño web. Comentamos sus aspectos más importantes y cómo se deben poner en práctica.
¿Qué es la optimización de UI?
Las siglas aluden a User Interfacte o interfaz del usuario. Cuando se realiza es para conseguir que quien usa una aplicación siga una ruta previamente estipulada por nosotros. El objetivo es que esa persona vaya accediendo a las secciones que nos interesan para aumentar las probabilidades de conversión.
Además, la meta se consigue de forma natural y sin forzar nunca al cliente potencial. Se trata, en definitiva, de convertir lo que se ofrece en una necesidad y las opciones disponibles en la mejor herramienta para satisfacerla.
Principios del diseño UI
Son diversos los aspectos que inciden en que el diseño de la interfaz sea útil. Comentamos los puntos más imprescindibles.
La naturalidad
Es posible utilizar los mapas mentales para adelantarse a lo que el cliente va a solicitar de la interfaz. Se trata de emplear una simbología que se entienda fácilmente y de acompañarla de imágenes reales. Así, se consigue que la persona asocie la realidad que conoce con lo que requiere de la interfaz de usuario (UI). El uso ha de ser intuitivo sin que ello implique que haya que explicar nada para sacarle el máximo partido al sitio web.
La consistencia en estilos
Lo más habitual es que el usuario estándar conozca qué es una interfaz y cómo desplazarse por ella.
El diseño se completa con una presentación visual basada en los colores corporativos y en analizar cómo se comportan los elementos interactivos. Cuanto menos esfuerzo tenga que hacer quien esté interesado en la página web, mejor que mejor.
Claridad, sencillez e interacción
Es aconsejable evitar los diseños recargados y apostar más por el minimalismo. Asimismo, el buen diseño debe incluir elementos que supongan que el usuario realice alguna acción concreta. La experiencia será más completa y aumentará el compromiso con el sitio web.
Respecto a la sencillez, lo más recomendable es que la interfaz no sea un elemento omnipresente. Es preferible que contenga la información justa para ir de una sección a otra sin necesidad de explicaciones añadidas. Evitar los iconos complicados y apostar por el estándar (por ejemplo, para guarda un archivo utilizar el que representa un disquete) contribuye a evitar las dudas y a mejorar la relación con la usabilidad del sitio web.
Técnicas de diseño UI
Pasamos a comentar cuáles son las claves para la optimización de UI desde un punto de vista práctico. El denominador común de cada técnica es «menos es más». Aunque parezca lo contrario, a mayor sencillez, más eficacia.
El contraste y el color
Hasta no hace demasiado tiempo era frecuente encontrar una paleta completa de colores en un sitio web. Este tipo de diseños solo contribuye a entorpecer la acción del cliente. Así, lo más recomendable es:
- El empleo de elementos planos.
- Las paletas con un único color o con tres como máximo. Puede tratarse de los colores corporativos.
- La combinación de colores apostando por un contraste alto para resaltar las áreas de interés. El juego con las sombras contribuye a llamar la atención de la persona de forma discreta.
La meta de conseguir un impacto visual es más alcanzable y se consigue que el usuario sepa qué tiene que hacer en todo momento.
Más iconos que imágenes
Si bien antes hemos comentado que habría que incluir alguna imagen real, ello no significa que la interfaz se convierta en un álbum de fotografías. Los iconos ayudan a asociar su imagen con una acción concreta. Al mismo tiempo, se entienden con facilidad y contribuyen a no lastrar el tiempo de carga, y el posicionamiento en los buscadores, de un sitio web.
Tarjetas o cuadrículas informativas
Las tablas con datos han pasado a la historia para convertirse en tarjetas o cuadrículas con un avance de la información que se quiere trasmitir. Ello ha provocado que desaparezcan las líneas separadoras y que el diseño sea más limpio y homogéneo.
La tipografía
Al igual que ocurría con los colores, el uso de distintas fuentes en la interfaz parecía aportarle un matiz distinto a la interfaz. El diseño UI más adecuado es el que utiliza una única fuente, aunque utilizada con distintos tamaños y grados de opacidad.
La elección de la tipografía se ha convertido en una seña de identidad de cada empresa. No en vano, los títulos, los subtítulos y los contenidos generan atención en el usuario y son una parte fundamental de un sitio web. Se recomienda elegir un tipo de letra que sea coherente con el logotipo y que marque la diferencia para que el cliente potencial la asocie con la empresa en cuanto la reconozca.
El uso de los espacios en blanco
Suele entenderse que la mejor opción para que un sitio web genere más interés es llenarlo de contenido. Sin embargo, ello no significa que la interfaz esté repleta de elementos, puesto que esta situación podría provocar cierto rechazo. Separar las secciones con espacios en blanco aporta mayor limpieza a la interfaz y más facilidad a la hora de saber cómo interactuar con cada sección. Aplicar un color de fondo ayuda a convertir la experiencia en una más inmersiva.
La parte central e inferior de la interfaz
En la mayoría de mapas de calor que se realizan de un sitio web son las dos partes en las que se producen más clics. Por lo tanto, a la hora de generar tráfico es donde deben ubicarse las secciones que puedan generar mayor interés.
Siguiendo los pasos anteriores resulta más fácil lograr la optimización de UI para que la interfaz de usuario sea más eficaz. La combinación de factores da como resultado una propuesta más fácil de utilizar y más cercana a su destinatario final. Todo sea por adaptarse a las nuevas tendencias y por convertir cada página en un reclamo que genere más tráfico orgánico y conversiones.
Consejos de UI, Diseño Impactante, diseño web, Diseño Web Efectivo, Experiencia del Usuario, Optimización de UI, pasiona
Volver